Carvado de sellos

¡Bienvenidas a todas por aquí de nuevo! He estado descansando una semanita, bueno, descansando no, porque he estado de parranda, he estado de vacaciones con mis padres. Nos hemos ido a Londres, les he hecho de guía de la ciudad, de traductora y aunque mi hermana no nos pudo acompañar, lo hemos pasado en grande. 

Londres es una ciudad que me encanta, ya iré enseñando fotos, pero esta vez la he disfrutado de otra manera, a parte de que hemos pillado unos días de verano nunca vistos (o pocas veces) en esta ciudad.

A lo que iba, ya vuelvo a estar por aquí, con las pilas cargadas y con un lío en el teclado... (esto de dejar el ordenador tantos días...), pero me ha ido genial, he desconectado casi del todo, ni cobertura, ni móviles, ni teclados, ni nada, sólo mi cámara de fotos, mi familia y yo.

Empezamos de nuevo con el blog con un carvado de sellos, un sello al que le tenía muchas ganas, no por difícil, sino porque representa al blog. 
Tenía un trozo de goma y las gubias, solo me faltaba tiempo para hacerlo y creo que no quedó mal del todo teniendo en cuenta que llevaba muchos días sin practicar. Hace un tiempo me apunté a un taller de carvado de sellos, os lo enseñé aquí. 

A ver qué os parece como me quedó.

Tengo que acabar de pulirlo, pero aquí lo tenéis. ¿Qué os parece? No está mal del todo, ¿no?

¿Qué tal os ha ido esta setmana? ¿Me habéis echado de menos? ¿Ni un poquito? Yo a vosotras, un poquito! ¿Me he perdido algo interesante esta semana?

Muchas gracias por seguir por aquí, tengo muchas cositas para enseñaros y muchas ganas de no parar.

Feliz lunes y hasta pronto,

Blanca